miércoles, 22 de febrero de 2012

MUERTE DE ANTONI TÁPIES




Antoni Tàpies i Puig, una de las figuras mas destacadas del siglo XX, nació en Barcelona el 13 de diciembre de 1923 en una familia burguesa, culta y catalanista y murió el 6 de febrero de 2012. Fue un pintor y escultor del arte español de formación autodidacta, que creó un estilo propio dentro del arte de vanguardia en el que combinaba tradición e innovación dentro de un estilo abstracto pero simbolista. Además del importante sentido espiritual imperante en sus obras, sus inicios tienen lugar en una larga convalecencia de una enfermedad pulmonar, por la cual más tarde abandona sus estudios de Derecho para dedicarse plenamente a su pasión.
Su pintura podría dividirse en varias etapas en las que expresa su sensibilidad ante los hechos que se desenvolvían en su vida. A raíz de la II Guerra Mundial, expresa un destacado interés por el polvo, los átomos y las partículas que usa formalmente en sus obras para experimentar nuevas técnicas.
Durante los años cincuenta y sesenta, elabora una serie de imágenes tomadas de su entorno más inmediato, mostrando así las etapas de su evolución. Sus obras siempre han sido permeables a los acontecimientos políticos y sociales del momento, y a finales de los sesenta y principios de los setenta se intensifica el carácter de denuncia y rechazo ante la dictadura.
En los ochenta, adquiere una fuerza renovada, en los que realiza obras con goma-espuma, o con la técnica del aerosol con la que utiliza barnices manteniéndose muy activo en el campo de la obra gráfica.
A finales de los ochenta, sin embargo se vuelca en la cultura oriental, que pasa a ser la influencia filosófica fundamental en su obra.
Las obras de sus últimos años tratan esencialmente sobre una reflexión sobre en dolor físico y espiritual influido por el pensamiento budista. Su práctica artística sigue siendo permeable a la brutalidad del presente, a la vez que ofrece una forma que, pese a su ductilidad, permanece fiel a sus orígenes. En este sentido, las obras de los últimos años no sólo se inscriben en la contemporaneidad, sino que también son un registro del pasado del artista.
Las obras de Tàpies han tenido una gran valoración a nivel nacional e internacional. A lo largo de su carrera, además, ha recibido numerosos premios entre los que cabe destacar el Premio de la Fundación Wolf de las Artes, la Medalla de Oro de la Generalidad de Cataluña, el Premio Príncipe de Asturias de las Artes, la Medalla Picasso de la UNESCO y el Premio Velásquez de Artes Plásticas.Como reconocimiento a su trayectoria artística el rey Juan Carlos I le otorgó el 9 de abril de 2010 el título de marqués de Tàpies.
Podemos decir que, este artista, ha dejado un legado que quedará como materia y huella para el futuro.




(Carmen María Moreno, Javier Rojano y Andrea Torrico)

No hay comentarios: