El
pasado 25 de abril fue dado a conocer el fallo de la 56 edición de los Premios
de la crítica 2014, en este acto participaron la alcaldesa de Logroño, el
presidente del jurado del Premio y Enrique Turpín. El galardón otorgado en la
categoría de novela en lengua castellana ha sido entregado a Rafael Chirbes, por
su obra titulada En la orilla; y en
la categoría de poesía en castellano, este reconocimiento ha sido concedido a
Antonio Hernández, con su obra Nueva York
después de muerto.
Este
galardón es concedido por la Asociación Española de Críticos Literarios desde
1956 y se otorga a los mejores libros de narrativa y poesía publicados en
España el año anterior, tanto en castellano como en cualquier otra lengua del
Estado como el gallego, euskera o catalán.
Así, en
lengua catalana se ha premiado la novela de Pep Coll Dos taüts negres i dos de blancs y la obra de poesía Alba del vespre, de Carles Duarte. En
lengua gallega los galardones han correspondido a la novela del autor Anxos
Sumai A lúa da colleita y al poemario
de Berta Dávila Raíz da fenda. Por
último, el galardón en narrativa vasca ha sido para Nevadako egunak de Bernardo Atxaga y para la obra poética en dos
partes Heriotzarenataria dugu bizitza
y Bizitzaren atea dukegu heriotza del
escritor Joxan Artze.
Rafael
Chirbes, el galardonado por crítica de novela en lengua castellana, nació el 27
de junio de 1949 en Tabernes de Valldigna (Valencia). A los 16 años se trasladó
a Madrid para estudiar Historia Moderna y Contemporánea, tras vivir en
numerosos países, finalmente en el año 2000 regresó a Valencia. Su carrera
laboral comenzó centrada en la crítica literaria y posteriormente daría paso a
otras actividades periodísticas.
Su
primera novela, Mimoun (1988) fue
finalista del Premio Herralde y su obra La
larga marcha (1996) fue galardonada en Alemania con el Premio
SWR-Bestenliste. Con esta novela inició una trilogía sobre la sociedad española
que abarca desde la posguerra hasta la transición que se completa con La caída de Madrid (2000) y Los viejos amigos (2003). Con Crematorio (2007) recibió el Premio
Nacional de la Crítica
y el V Premio Dulce Chacón. Su novela En
la orilla (2013) habla sobre el futuro de España, con actitud pesimista ya
que se encuentra en crisis moral y de valores, hasta construirse una sociedad
injusta y falsa. Según el jurado, Chirbes ha sabido retratar la realidad social
de nuestro país y es considerada por algunos el mejor libro del año.
El otro
galardonado, Antonio Hernández, ganador en la categoría de poesía en lengua
castellana por su obra Nueva York después
de muerto, es poeta, novelista y ensayista.
Este
escritor es la segunda vez que recibe ya este premio, recibiéndolo por primera
vez en 1994. Este galardón es el único que se otorga a obras literarias
publicadas en las cuatro lenguas oficiales del país.
Antonio
Hernández nació en Arcos de la
Frontera, en el año 1943. Estudió Ciencias de la Educación y, tras esto,
empezó a dedicarse a la creación literaria, periodística y a dar conferencias.
Es un
poeta que ha cultivado la memoria de la infancia, el lirismo y la emoción y su poesía
nace de la convicción del sentimiento y la conmoción. Perteneciente a lo que la
crítica ha denominado generación o grupo de los sesenta, Antonio Hernández ha
ganado algunos premios en la categoría de poesía como el Adonáis, Miguel
Hernández, Vicente Alexandre o el Tiflos.
Nueva York después de muerto es un
libro en el que el autor recoge un cruce de vidas y destinos que acaban en la
ciudad de la muerte y de la aurora según el jurado.
Como
escritor, ha publicado hasta la fecha unos cincuenta libros de poesía,
narrativa y ensayo, comenzando con la publicación en 1969 de Oveja negra. Además, muchas de sus obras
han sido traducidas a varias lenguas.
Antonio
Hernández es uno de los autores más sólidos de la poesía española del último
medio siglo.
( Rocío Santos y Jorge Peinado)
No hay comentarios:
Publicar un comentario